3/12/12

REPERCUSIONES DEL LIBRO HOMENAJE AL PADRE HERNÁN

Un libro homenaje al padre Hernán Pérez EtchepareViernes 30 Nov 2012

12:12 pm Buenos Aires (AICA):
 Un libro de homenaje al padre Hernán Pérez Etchepare, fallecido el 27 de enero de 2012, fue presentado en un acto realizado en la Casa de la Provincia de Buenos Aires. El libro reúne setenta ¨cartas y poemas al padre Hernán¨ escritos por personas que estuvieron vinculadas al Café del Abrazo Literario, que el sacerdote de la Sociedad de San Pablo promovió en los últimos años, desde junio de 2007. Era una reunión mensual en la que los asistentes conversaban y compartían la lectura de poesías de temática religiosa. ¨El padre Hernán hacía muchísimas cosas: director de La Liturgia Cotidiana y de la Hojita del Domingo de Editorial San Pablo, pastoral carcelaria, pueblos originarios, diálogo ciudadano e interreligioso, etc. pero sin duda su pasión mayor, porque lo llevaba en el alma, era la poesía. El Café Literario y sus poetas eran su pasión. Paradójicamente, cuando falleció y salió su historial, en ningún lugar se mencionó esto, pero yo doy fe que fue así¨, asegura en la publicación Elsa Llorente de Llaneza. Imprimir Enviar por mail
Compartir: Un libro de homenaje al padre Hernán Pérez Etchepare, fallecido el 27 de enero de 2012, fue presentado en un acto realizado en la Casa de la Provincia de Buenos Aires.
El libro reúne setenta "cartas y poemas al padre Hernán" escritos por personas que estuvieron vinculadas al Café del Abrazo Literario, que el sacerdote de la Sociedad de San Pablo promovió en los últimos años, desde junio de 2007.
Era una reunión mensual en la que los asistentes conversaban y compartían la lectura de poesías de temática religiosa.
También había quienes mantenían con él relación por correo electrónico y a quienes a veces publicaba poesías en “La Liturgia Cotidiana”. Esa relación con personas que en algunos casos el sacerdote nunca vio hizo que esa iniciativa tuviera eco en otros puntos del país.
"El padre Hernán hacía muchísimas cosas -dice en el libro Elsa Llorente de Llaneza, de la ciudad de Buenos Aires-: director de La Liturgia Cotidiana y de la Hojita del Domingo de Editorial San Pablo, pastoral carcelaria, pueblos originarios, diálogo ciudadano e interreligioso, etc. pero sin duda su pasión mayor, porque lo llevaba en el alma, era la poesía. El Café Literario y sus poetas eran su pasión. Paradójicamente, cuando falleció y salió su historial, en ningún lugar se mencionó esto, pero yo doy fe que fue así".
}La señora de Llaneza condujo el acto junto con Eva Lucero de Ortega, directora de Editorial L. V., de Chascomús, que publicó el libro. Se trata de una tirada limitada; no está destinada a las librerías sino a "convertirse en una joya en las bibliotecas familiares de cada uno de los autores". Cada colaborador recibió un diploma en el acto, en el que cantó un coro de adultos.
La señora de Ortega indicó que "la compilación de tantos sentires ha dado como fruto un contenido que habla de fraternidad, esa fraternidad que reinaba en cada uno de los encuentros del Café". Y afirmó: "Cada vez que un libro nuevo aparece con nuestro sello, alabamos al Dios Uno y Trino que nos permite seguir caminando en la evangelización de la cultura".
El libro incluye un escrito del padre paulino Benito Spoletini, que recuerda al padre Hernán como el "eterno sonriente" y señala que cuando se hizo cargo de La Liturgia Cotidiana, con una habilidad notable unió esa publicación con la religiosas popular, "expresa en las oraciones, poesías o reflexiones que enviaban los lectores, que él, con fineza de editor, había involucrado en la hechura de la revista".
La señora de Llaneza comentó que ese escrito fue el último trabajo del padre Spoletini ssp, que tenía más de noventa años. "Una semana después de que me mandó el trabajo pasó a acompañar al padre Hernán en el cielo".
Colaboraron en el libro, entre otros, los poetas Emilio Breda, Carlos María Romero Sosa y su hermana, Graciela Romero Sosa; la hermana paulina Virginia Romero hsp (que no pudo estar presente por haber sido destinada a Paraguay), la locutora Dorita Espíndola de Cortés y el hermano Santiago Kloster ssp, entre otros.
El padre Hernán Pérez Etchepare falleció a los 47 años, con 26 años de vida paulina y apenas 13 de sacerdocio, en los que realizó una fructífera labor.
El padre Spoletini en su escrito menciona la última poesía del joven padre Hernán, que decía: "Me miro desde el otro/para poder amarme/también me abro al infinito/y me uno a los más distantes". Y comentó el anciano sacerdote que murió poco después: "Ahora ha encontrado ese infinito que es Dios y muchos "distantes": los amigos que poblaron su vida".+ (Jorge Rouillon)

1 comentario:

  1. Quiero agradecer al Sr. Periodista Jorge Rouillón por su crónica en AICA. Mi gusto hubiera sido dárselas personalmente. Lamento no poder comunicarme con el.
    Elsa Lorences de Llaneza

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