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CON LA FE DE MI ALMA (Una Carta para Pascua y Pentecostés en el año 2012)
El mar resuena, nos llama, y muestra lo poderoso del universo…
No sabemos, realmente cuan cierta es la expresión “El Amor lo es todo”, (Love is all you need), hasta que vivamos plenamente en el amor… No importa si atravesar nuestro desierto para llegar a eso, lleva 40 años o 40 días. El tiempo de Dios no se mide en nuestro tiempo humano.
En mi caso son 40 años, marcados, y muy míos, que transito en conversión y búsqueda, siempre con la Fe de que se cumpliría las promesas que sentía de Dios. Tal vez tenía que pasar por eso para descubrirlo y escribir sobre los sucesos. Espero que mi experiencia sea como un signo de las maravillas no esperadas que se encuentra en el camino estrecho. ¡El mayor signo es el amor! Muchas veces nos angustiamos por una carencia de Fe plena, pero con La Fe en su plenitud, todo se realiza para bien.
La tradición, y nuestro corazón, nos llaman a una continua vuelta a “La Casa del Padre”, una continua preparación y realización de Jubileo. Las promesas de Dios van más allá del tiempo o espacio, vida o muerte, y es Dios quien da hijos hasta a la mujer, que por naturaleza, no está en condición de parir…
En este tiempo he rezado incesantemente para que se realice mi vida en la Voluntad de Dios. Por supuesto, había muchos altibajos, y toda variedad de experiencias. Para los humanos 40 años es mucho tiempo, y muy simbólico también.
Hace muchos años (como 15), rezo una “Oración Al Sagrado Corazón de Jesús” que comienza diciendo: “Vengo ante Ti con La Fe de mi Alma a buscar Tu Consuelo”, y también otra, “Oración Para Los Enfermos”, que proclama “La Salud del Alma es lo que más importa”.
¡Cuántos resultados de amor, familia, amistad, hasta patria, y sentido de la vida, me han dado estas experiencias en el caminar por un desierto incierto y a veces imposible, pero siempre intentado seguir el tambor del corazón y del Espíritu!
“Que tu poderoso brazo Jesús, cierre las puertas que deben cerrarse, y abra esa puerta que permite que entre a nuestra vida, tu luz, la sabiduría y la gracia, la promesa de tu Espíritu Santo, y tu bienestar…”. .. Para llegar a esta edad, con más años y buena salud, con una vida realizada y plena…
Fueron duras las lecciones y pruebas de la vida, pero aprendí que es verdad lo que dice Chiara Lubich en su libro “María, Humanidad Realizada”,... “La plenitud del hombre y la mujer está en la relación con Dios. Creo que cuando han superado las pruebas los santos están entonces en condiciones de poder influir con el carisma que Dios les ha dado, no solo sobre la obra particular que ellos han fundado, sino sobre toda la Iglesia”.
Estos ejemplos y testimonios de vida nos ayudan a saber cómo seguir en una forma apropiada, y con menos dificultades. A la vez, muchos son los casos que muestran que Dios hace lazos entre ciertas personas que jamás podrán romperse. Nos da signos y diseños para confirmar esas relaciones especiales. Nuestra historia no depende de solo un titulo o estado civil, o de un documento escrito, sino de una decisión de amar plenamente y entregarse a la Voluntad de Dios. Basta esa entrega y confianza, para que Dios haga el resto.


Después de una conversión y Bautismo de Espíritu, viene Pentecostés, la llegada del Espíritu. Simbólicamente son 50 días después de la Pascua, pero como el Espíritu “va y viene”, (otra vez insisto), no depende del tiempo humano. El paráclito (O Espíritu Santo) en griego quiere decir “El Invocado”, se hace presente, después de una preparación de purificación, es algo que invocamos y esperamos. Hay una capacidad, y con práctica, una habilidad que desarrolla junto con la disponibilidad y el conocimiento.
Dice Chiara, (La Virgen) “queda como el núcleo, en el centro espiritual de los apóstoles, en el Cenáculo, esperando la Venida del Espíritu Santo”. Y esta “unción transformante” toma el lugar de Jesús en la culminación de la vida espiritual. “Tal vez corresponda a nuestra época la tarea de escudriñar los efectos de Pentecostés en María y de intuir las admirables novedades acaecidas en ella, convertida ya en “colaboradora “de Cristo Redentor”. Esto siempre se refleja en obras de arte, escultura, pintura, arquitectura, o música… en obras de bien, evangelización… algo que haya en el alma y que vive para siempre.
“La Virgen siempre fue considerada el modelo de la contemplación. Por lo tanto, esta búsqueda de espiritualidad encuentra en ella la respuesta”. Para el Mundo contemporáneo, María era una mujer casada, y madre, y con la ayuda de Dios supo ocuparse de las cosas mundanas, mientras tanto, siempre estuvo presente también el deseo de que la vida fuese una aventura. Todos sus planes cambiaron y ella siguió el Plan de Dios, el cual meditaba diariamente.
Al principio de su aventura hay hechos externos excepcionales. La vida de María fue un viaje, a Belén, Egipto, Nazaret, a seguir a Jesús, hasta la Asunción que siempre estará más allá de cualquier posible sueño o realización de los que hoy quieren “viajar”. Ella “deja el sistema de leyes antiguas para seguirlo, para insertarse en las estructuras de su hijo. Esta nueva estructura abre a todos los seres, los excluidos o rechazados. Ya todos somos hijos de María, y es El Espíritu el Bien más apreciado de esta relación”. Y las experiencias espirituales de “viaje”, marcan la vida.
Siempre fui una persona de profunda contemplación y les he animado a vivir la Fe y al amor plenamente, especialmente en lo cotidiano. Esto es necesario y lo máximo. Pero, no olvidemos el mayor poder de Dios de hacer milagros. Creo en los Milagros. Sin el esfuerzo diario, poco sentido tienen los milagros. Así que, junto con mi tarea cotidiana, me preparo para recibir ¡Milagros!
El Paráclito llega con ráfagas del sonido, y lenguas de fuego. Teniendo respeto y temor a Dios, nos tranquilizamos. El mar se calma. Habrá como una convergencia en el mundo de todas las buenas acciones que hacemos con humildad en lo cotidiano. Tal vez es necesario que pasen situaciones difíciles hasta que el mundo aprenda que no se puede negociar al amor, y para que se desarrolle el resultado del amor interno, con pensamientos sanos y puros, en donde yace la raíz de toda acción… El tiempo es propicio para una conversión sincera.
¿Qué son 40 años? … ¿Qué son para una persona que se reencuentra con su hijo primogénito que había dado en adopción en el año 1972, siendo una mujer muy joven, sola y sin apoyo? Son la gran Consuelo de saber que él está bien criado, sin rencores, lleno de amor, bondad y gracia. Son el Amor y la Fe en su plenitud. ¡Son las promesas de Dios realizadas

Por: Karla Wagener, del Café del Abrazo Literario.